Cómo fijar precios de pestañas que reflejen tu valor

19 abr 2025

¡Seamos realistas! Nada es más incómodo que hablar de dinero con clientas que parecen amigas. El vínculo que se construye como profesional de la belleza es profundamente personal. No solo estás regalando extensiones de pestañas o haciendo manicuras espectaculares; eres parte terapeuta, parte chica de moda y parte una experta en glamour a tiempo completo. Así que, a la hora de subir tus precios o incluso fijarlos, puede resultar incómodo .

Pero la verdad es esta: no se puede tener éxito ni dirigir un negocio de pestañas exitoso sin unos precios sostenibles. Si quieres mantenerte al día, tener un balance y un saldo de ahorros, debes cambiar tu mentalidad y empezar a ver los precios como una poderosa forma de autoestima y crecimiento empresarial.

A continuación, le mostramos cómo establecer (o restablecer) con confianza los precios de sus servicios de extensiones de pestañas o uñas, sin culpa, dudas o miedo a perder clientes.

1. Enfrenta el miedo: entiende qué es lo que realmente te frena

Antes de siquiera tocar el menú de pestañas o la tabla de precios de uñas, reflexiona un momento. ¿Qué te impide cobrar lo que vales?

Pregúntate por qué y sigue preguntándote hasta que encuentres la verdadera razón.

  • ¿Es miedo a perder clientes leales?
  • ¿Te preocupa no ser “lo suficientemente bueno” todavía?
  • ¿Compararte con artistas con más experiencia?

Sea cual sea el motivo, nómbralo para poder reformularlo . Reemplaza esas creencias limitantes con afirmaciones y recuerda el valor que aportas. Revisa testimonios de clientes, fotos de tus momentos de transformación o mensajes donde alguien dijo: "¡Me cambiaste la vida!". Esa es tu magia y merece una compensación adecuada.

2. Conoce a tu cliente ideal como a un mejor amigo

El precio no es solo una cuestión de números: es una cuestión de a quién intentas atraer.

Pregúntese:

  • ¿Dónde trabaja tu cliente ideal?
  • ¿Qué la motiva a reservar un relleno de pestañas o uñas nuevas cada 3 semanas?
  • ¿En qué gasta su dinero aparte de en belleza?

Esta perspectiva te ayuda a definir no solo tus precios, sino también toda tu experiencia de marca. Si tu cliente ideal valora el lujo y el cuidado personal, tus precios deberían reflejarlo. No solo ofreces pestañas, sino confianza , ahorro de tiempo en maquillaje y una atmósfera única.

3. Haz las matemáticas, hermana

Hablemos de números, porque las vibraciones no pagan alquiler.

El precio de su servicio de pestañas o uñas debe ser un reflejo directo de su:

  • Costos de productos (pestañas, adhesivos, desechables, etc.)
  • Tiempo empleado (no olvides la configuración y limpieza)
  • Gastos generales (alquiler, servicios públicos, seguros)
  • Nivel de habilidad (¡sí, eso importa!)
  • Objetivos empresariales (ganancias, ahorro, educación, expansión)

Aquí tienes una fórmula sencilla para empezar:
COSTO x 2 = Precio

Ejemplo:

  • Costo del producto = $10
  • 3 horas de tu tiempo a $30/hora = $90
  • Costo total = $100
  • Precio = $200

Ahora tienes un precio que cubre tus costos , respeta tu tiempo y te da margen para que tu negocio crezca . Revísalo cada pocos meses, ya que a medida que subes de nivel, tus precios también deberían hacerlo.

4. Mantenga su menú limpio y estratégico

¿Alguna vez has entrado a una peluquería y te has sentido abrumado por un millón de opciones y actualizaciones confusas? ¡No lo hagas!

Un menú optimizado y bien diseñado hace que sea más fácil para los clientes reservar y para usted realizar ventas adicionales intencionalmente.

Consejos:

  • Agrupa tus servicios más populares.
  • Mantenga las descripciones claras y centradas en los beneficios.
  • Utilice el anclaje y establezca un nivel premium en la parte superior para que los servicios de rango medio parezcan más accesibles.
  • Resalte sus conjuntos distintivos (esto ayuda a diferenciarlo de la competencia local).

Lo más importante es dejar de obsesionarse con lo que cobra la competencia. Céntrate en tu valor único, ya sea tu retención, tu estilo, tu rapidez o tu atención al detalle. No hay nadie como tú en tu ciudad. Aprovéchalo.

5. Carga con confianza o corre el riesgo de agotarte

Aquí va la lección: si no fijas el precio de tus servicios para reflejar tu valor, terminarás resentido con tus clientes, tu negocio e incluso tu oficio. No te convertiste en artista de pestañas o uñas para trabajar sin parar sin obtener nada a cambio.

Tus precios deben ser empoderadores, sostenibles y rentables.

Porque un artista quemado no puede construir un imperio.

Mereces prosperar

No tienes que disculparte por querer más. No tienes hambre de dinero por cobrar lo que vales. Estás construyendo un negocio de belleza, y eso requiere estrategia , confianza y límites .

Así que adelante. Reconsidera esa lista de precios. Actualiza tu sitio de reservas. Anuncia tus nuevas tarifas con orgullo. Los clientes adecuados las respetarán, y los inadecuados nunca fueron tus clientes soñados.

Ve a buscar tu bolso, cariño. Tu yo del futuro te lo agradecerá.

Besos y abrazos,
Academia Mega Lash